Segunda novela publicada en España de Charles Stross, perteneciente como el anterior "Cielo de Singularidad" a la serie del Escaton en la que conparten universo y algún personaje pero que son totalmente independientes entre sí.
Una estrella G2 no explota sin más, al menos sin interferencias externas, así que los supervivientes del planeta Moscú, aniquilado en un suceso así, han lanzado un contraataque contra el responsable más probable: el sistema vecino de Nueva Dresde.
Pero Nueva Dresde no es la responsable, y mientras los letales misiles se aproximan a su objetivo, a Rachel Mansour, representante de los intereses de la Vieja Tierra, se le encomienda la misión de averiguar quién ha sido. Frente a ella se encuentra un enemigo desconocido, además de inimaginable, y en juego está no solo el destino de Nueva Dresde, sino también el orden del universo entero. Y la única persona que conoce la identidad de ese enemigo es una descreída adolescente que no tiene ni la menor idea de lo que está pasando...
A partir de esta sipnosis Stross crea una space opera de nueva generación con unos personajes atractivos y un sentido de ritmo admirable. Utilizando flasback vamos conociendo en profundidad a los personajes, sus motivaciones y en algún caso sus culpas y miedos. Un fallo típico de muchas spaceoperas es que los personajes son arquetípicos y de cartón piedra, en los últimos años esto ha cambiado radicalmente. Stross nos ofrece unos personajes que con las lógicas diferencias son creibles y actuales. Así si le sumamos que tiene una sólida base científica, lo mezclamos en la coctelera y tenemos un ejemplo de como escribir una obra ágil y entretenida pero que al mismo tiempo trata de temas tas lejanos como los genocidios, el poder político, el control sobre los medios de comunicación o los problemas de la adolescencia.
Todo ello en una aventura a un ritmo apasionante.
Me resulta además francamente curioso que Stross viva cerca de Edimburgo, donde viven otros autores que escriben lo que se ha llamado New Space Opera, o más de manera más sencilla, Space Opera que se preocupa de los personajes, las tramas y de los contenidos científicos. Vamos, en resumen, que están bien escritas. Bueno, pues que me resulta llamativo que en la misma ciudad vivan Charles Stross, Iain Banks y Ken Mcleod (estos dos además son amigos)... y que escriban todos new space opera....
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